Día 31: Halloween

¡Hola! Bienvenida/o al día 31 del Stamptober, ¡oh! Esto ya se acaba, pero antes el último tip de la mano de Sheila, nos explica otra manera de colorear nuestros sellos

¡Hola, hola!

Antes de nada me gustaría agradecer a Aida que haya pensado en mi para colaborar en este bonito proyecto con el que cumple tres años llenando de color el mes de Octubre.

Mi pequeña aportación será explicaros un poco como utilizo las pinturas acuarelables para colorear los sellos.

Para empezar me gustaría hacer una breve introducción a este tipo de lápices de colores.

Los lápices acuarelables pueden parecer unas pinturas normales pero al añadir un poco de agua a lo que estamos coloreando se consigue un efecto increíble convirtiéndose en un acabado como el de las acuarelas. La mina de este tipo de pinturas es soluble en agua por lo que los podremos utilizar en seco, con agua o mezclando ambas técnicas según el acabado que queramos conseguir. Los colores tanto sí los aplicamos solos como si los mezclamos, al aplicar el agua con el pincel se funden y es cuando los pigmentos dan vida al elemento coloreado. Crear sombras y difuminar para poder dejar unas partes más claras que otras es muy fácil sí usáis esta técnica.

Lo primero que necesitamos es papel de acuarela para que no se pase el agua y en nuestro caso, como solemos trabajar con sellos estampados con tinta, tened en cuenta que si no está la tinta suficientemente seca se correrá al aplicar el agua. Se podría utilizar tinta “Stazon” que como sabéis es una tinta al disolvente de secado rápido y sí vamos con prisa sería la mejor opción.

Una vez que tenemos estampado el sello coloreamos con las pinturas de manera normal. Podemos mezclar colores para crear efectos diferentes mezclando diferentes tonos o sombras combinando un color más claro con uno más oscuro.

Una vez coloreada toda la figura unificamos los colores utilizando el pincel humedecido. En esta foto podéis ver como se ha unificado todo al aplicar el agua. Hay que tener cuidado de limpiar bien el pincel y retirar el exceso de agua en un trapito, además de no mezclar colores que no queramos porque al ser dibujos pequeños en la mayoría de los casos, es fácil que se nos pueda correr con el agua el color de una zona a otra, en este caso, sino tenemos cuidado podríamos mezclar el azul de la chaqueta con el gris del oso y sería un desastre.

Os he preparado un pequeño vídeo coloreando una figura para que veáis como primero aplico los colores y después con el pincel voy unificando todas las zonas.

Espero que os haya gustado esta técnica y os animéis a probarla. Como todo en la vida es cuestión de práctica y de que te guste, aprender a utilizar los lápices acuarelables.

Existen un montón de marcas con este tipo de pinturas y una gran gama de colores. La marca que yo estoy utilizando es “KOH-I-NOOR”, es una marca de la Republica Checa que data de 1790. No es una marca muy conocida, pero tiene una relación calidad/precio estupenda.

La serie de lápices acuarelables se llama “MONDELUZ” y se pueden comprar en series de 12, 24, 36, 48 y 72 unidades.

¡Ha sido un placer haber sido invitada en esta tercera edición del “Stamptober!

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